Un año mariano es un periodo convocado por un Papa para dedicarlo al culto a la Virgen María.
Que se rindiese culto a la Virgen María, en las capillas o altares ubicados en cada ciudad y se hiciesen actividades privadas y públicas en honor a la Virgen María, que se hiciesen peregrinaciones en lugar donde el culto mariano es de una especial devoción, además de forma a especial al Santuario de Nuestra Señora de Lourdes y a la Basílica de Santa María la Mayor en Roma.
[1] Al finalizar el año mariano, el Papa coronó a Salus Populi Romani en la Basílica de San Pedro.
[7] En el año mariano tuvo lugar las visitas apostólicas fuera de Italia a Polonia, Estados Unidos, Canadá, Uruguay, Bolivia, Perú, Paraguay y Austria.
En la carta mencionada, se incluyeron los misterios luminosos a la oración del Santo Rosario.