Hay un yacimiento arqueológico localizado en la cima de una colina al centro del pueblo.
Al centro del pueblo se encuentra la estación de policía y el ayuntamiento, que las tropas gubernamentales ocuparon en febrero de 2012.
Durante meses, rebeldes locales atacaron sus posiciones e intentaron cortar sus líneas de suministro.
En junio de 2012, cuando el ejército se retiró del pueblo, este estaba destruido y desierto.
Los edificios del centro estaban dañados y sin electricidad ni agua.