Anexo:Billetes de México

$20, $50, $100, $200, $500 y $1000 Conmemorativos $100, $200, $500 y $1000 y $20 Conmemorativos La historia de los billetes en México, como comunes y válidos para todo su territorio, se remonta a 1917, año donde, por medio del artículo 28 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, se decretó que la emisión exclusiva correspondería a un Banco único bajo control gubernamental; para llevar a cabo esto, tardaría siete años para que tal banco existiera.

Eran impresos en una sola cara en papel blanco casi cuadrado, en medidas de 15 x 10 cm aproximadamente.

[1]​ Los primeros cambios destacables, monetariamente hablando, en las formas de divisa ocupada en México, fue el cambio oficial del real mexicano al peso mexicano en 1887 durante el gobierno de Porfirio Díaz, en el cual, ocho reales equivalían a un peso[2]​.

Con el esplendor económico del porfiriato, se propició la creación de bancos que emitirían sus billetes impresos como una forma fácil para solventar su equivalencia en metales preciosos.

Los billetes, en su mayoría, era impresos en el extranjero, pues en aquel entonces México no contaba con la tecnología suficiente para imprimirlos; la American Bank Note Company ya se había posicionado como una excelente compañía impresa de billetes.

La situación de poco control en aquel aspecto era tan poco controlada que, incluso, era una practica relativamente común que empresarios locales imprimieran sus propios billetes para ser entregados a los trabajadores y ser canjeados.

La tercera, que se llama «familia AA», en denominaciones de $1, $5, $10, $20, $50, $100, $1000 y $10000.

Se hizo en las mismas denominaciones que la anterior, únicamente exceptuando la primera y la última.

Pero llegó un punto en el que estaba tan devaluado el Peso mexicano que se debieron empezar a producirse billetes de denominaciones cada vez más alta.

Los primeros billetes que fueron emitidos por el Banco de México S.A. fueron impresos por la American Bank Note Company, Nueva York, por su alta calidad de trabajo en papel moneda, la cual era afamada y reconocida mundialmente.

Este hecho estimulaba la confianza del pueblo en el papel moneda del Banco de México, cuando dicha confianza se encontraba en su punto más bajo, debido a las grandes emisiones de papel moneda de la revolución, las cuales, en términos muy extensivos, nunca fueron canjeados, causando enormes perdidas económicas entre el pueblo mexicano.

Años más tarde debido a la inflación estos billetes se volvieron de uso común y mientras se acrecentaba el problema aparecían especies de mayor denominación.

En esta Nueva unidad se quitaron 3 ceros lo que significa que se dividía entre 1000, por ejemplo: Un Billete de Cincuenta mil pesos ($50000) ahora valía 50 Nuevos Pesos (N$50).

Esto significa que se pueden seguir utilizando para realizar transacciones, pero cuando lleguen a los bancos, estos deben separarlos para no volver a entregarlos al público.

A continuación se va a mostrar una tabla con los billetes Tipo C: Estos billetes se imprimieron en las mismas denominaciones y con los mismos diseños y dimensiones que los billetes de tipo C, pero eliminando la nomenclatura nuevos, además de que en el encabezado se suprime la antigua frase "Pagará a la vista al portador" dejando solamente la leyenda de "Banco de México".

En esta emisión, se imprime por última vez el billete de $10 pesos (MXN) en 1997, ya que era un gasto muy grande e innecesario su producción siendo ya existentes las monedas de la misma denominación.

Como dato curioso, en el reverso de este billete existe un error de impresión en la frase "Sufragio Efectivo, no Reelección” pues dice “Sufragio Electivo Y no Reelección”.

En el anverso muestra el retrato de Morelos, que aparece como motivo principal, en un grabado similar al del billete anterior (Tipo F).

A la izquierda del retrato se aprecia una viñeta formada por el estandarte de Morelos, dos cañones entrecruzados y el arco, la flecha y la palabra SUD; elementos, estos últimos, utilizados en las monedas acuñadas por el jefe insurgente.

Billete de diez pesos del Banco de Londres, México y Sudamérica emitido en 1887.