Las células objetivo son capaces de responder fisiológicamente, porque contienen receptores específicos a los que se unen las hormonas circulantes para producir esa respuesta.
Durante años se postuló que las hormonas afectaban a un solo tipo de célula o algunos tipos de células y que una hormona desencadenaba una única acción bioquímica o fisiológica.
Las células gonadotrofas ubicadas en la Adenohipófisis, tienen receptores específicos para la hormona liberadora de gonadotrofina (GnRH) secretada por el hipotálamo.
[5] Los hepatocitos ubicados en el Hígado, tienen receptores específicos para la hormona peptídica glucagón secretada por las células alfa.
El glucagón en el hepatocito, se une a su receptor -R de siete hélices receptor acoplado a proteínas G en la membrana plasmática, determinando la liberación de glucosa hacia la sangre, para elevar su nivel durante una hipoglucemia.