No se sabe a ciencia cierta si de hecho estudió arquitectura aunque participó como oyente en las clases de Friedrich von Schmidt en Viena.
Se especializó en arquitectura medieval y neogótica.
Carl Gangolf Kaiser continuó con los trabajaos realizados en Chapultepec y el Palacio Nacional por los arquitectos Julius Hofmann y Ramón Rodríguez Arangoiti.
Aunque en realidad no tuvo tiempo de hacer mucho debido a la caída del imperio.
Luego de la caída del Imperio regresó a Austria y participó en la restauración del Palacio Auersperg en Viena y de varios castillos en la Baja Austria, como por ejemplo el Castillo de Kreuzenstein para el conde Juan Nepomuceno de Wilczek en colaboración con Humbert Walcher, el Castillo de Liechtenstein y el Castillo de Seebarn.