El museo se encuentra ubicado junto al Salto del Tequendama en el río Bogotá.
[2] En julio de 1950 se planificó reconstruir el edificio para convertirlo en un hotel, pero la construcción nunca inició.
Gabriel Largacha era el diseñador y Domenico Parma era el constructor.
[3] Desde los años 1990, y por más de dos décadas, el hotel estuvo abandonado debido a la contaminación del río.
Actualmente funciona como museo, que tiene como principal objetivo concientizar a las personas de la contaminación del río Bogotá y como recuperar su ecosistema.