Sin embargo, a partir de esos años existe una demanda vecinal creciente reclamando dichos equipamientos.
Son los años de la "movida madrileña" en los que existe una gran explosión cultural y artística.
Así, con los concejales de Carabanchel Miguel Lara y Joaquín García Pontes se inauguraron tres centros culturales en tres barrios distintos del distrito y con los que inicialmente se podía atender a toda la población de Carabanchel.
Los tres centros culturales se construyen con el objetivo de que no existiera ningún barrio sin equipamiento cultural y que todos los vecinos puedan acceder a ellos de forma fácil y libre.
El centro sociocultural ha sido permanentemente remodelado para adaptarlo a las cambiantes necesidades culturales.
Dicho vagón desaparecería con este nuevo centro juvenil al que sustituyó.
Está situado, además, junto a un pequeño parque que le da mayor prestancia para sus actividades.