Cerro Portachuelo (Mérida)

El inicio de la subida hacia el Portachuelo desde este camino tiene pendiente relativamente fuerte pero que se hace más ligero hasta el pie del cerro.

La vegetación sobre los alrededores del cerro Portachuelo se ven fuertemente perturbados por la herbivoría, así como la frecuente intervención del humano en su tareas agrícolas y por el turismo frecuente en cercana asociación a la carretera Trasandina y el vecino Observatorio Astrofísico de Mérida.

Ella está predominantemente integrada por especies herbáceas y arbustos, ambas leñosas perennes, es decir, cuyas formas de vida tienden a ser siempreverdes.

Predominan los rosetales, especialmente los frailejones y cactáceas de los géneros Ferocactus que forman cojines compactos con espinas achatadas a los que se refieren frecuentemente como «plantas en cojín».

[2]​ Las zonas más bajas, hacia Apartaderos, los senderos que conducen hacia el llano del Hato y las lagunas que lo rodean se caracterizan por una vegetación que es mezcla de rosetales y pajonales en estrecha relación con pastizales y matorrales templados clásicos del páramo andino.