Muchas de estas localizaciones eran conocidas, especialmente antes de 1918, por sus nombres alemanes o rusos, algunas veces absolutamente diferentes a los estonios.
Después de la anexión de Estonia a la Unión Soviética en 1940, los nombres estonios fueron respetados pero escritos en ruso.
El uso de las fuentes rusas en otros idiomas incurrió en algunos errores de transcripción, como por ejemplo, Vilyandi o Pylva siendo Viljandi y Põlva su escritura correcta.
La mayor aglomeración urbana de Estonia es, con gran diferencia sobre las demás, la de Tallin con 521.313 habitantes (1 de enero de 2006).
Así encontramos que aproximadamente el 40 por ciento de la población del país se concentra aquí.