Combate de Agüi

Cuando llegó el comandante Saturnino García al castillo ya Guillermo Miller había comprometido la acción.

El ataque de Agüi costaba a los patriotas más de 20 muertos y otros tantos heridos: el mayor Miller, entre estos había recibido tres balazos que lo imposibilitado no sólo para seguir dirigiendo del ataque, sino para marchar por sí mismo.

Los soldados de su mando se afanaron en prodigarle la ayuda necesaria cargándolo hasta llegar al embarcadero.

Sus tropas, diminutas en su número, después de haber sufrido tan duro revés quedaron completamente inutilizadas para emprender un nuevo ataque.

Las fuerzas patriotas que dejó en aquella provincia al mando del comandante Jorge Beauchef habían logrado apoderarse de más poblados al sur obligando a las desacertadas fuerzas realistas a huir hacia Carelmapu para ponerse bajo la protección de Quintanilla.

Esté criticando la actitud de los oficiales de esas tropas, le coloco nuevos jefes y reordeno a las tropas, con la cual animado por el triunfo logrado en Agüi, le ordenó a estas fuerzas que destruyeran las disminuidas fuerzas patriotas y que recuperaran los territorios perdidos.

Desde entonces, el territorio dominado por los independientes de Chile se extendía hasta la ribera norte del Río Maullín.