La cicutina o coniina es un alcaloide neurotóxico derivado de la piperidina que se encuentra en diversas plantas, como las del género Conium —conocidas vulgarmente como «cicuta»—, en Sarracenia flava y en Aethusa cynapium.
Otros investigadores realizaron síntesis posteriores, como Leete, en 1970, empleando como producto de partida el ácido octanoico.
Posteriormente se presenta parálisis, que empieza en los miembros inferiores, disnea y confusión mental.
Al no ser afectado el sistema nervioso central la persona permanence consciente y lúcida hasta un estado avanzado de la intoxicación.
La cicutina paraliza los músculos al bloquear el receptor nicotínico en la membrana postsináptica de la unión neuromuscular causando una parálisis flácida.
En concentraciones altas se comportan como antagonistas no competitivos produciendo un bloqueo del canal iónico similar al que provocan algunos bloqueantes ganglionares; en estas concentraciones, los inhibidores de la acetilcolinesterasa no revierten el bloqueo neuromuscular sino que incluso pueden agravarlo.
[9] El tratamiento consiste en provocar el vómito o realizar un lavado de estómago dejando un purgante salino.