Su estilo es gótico, con planta dodecagonal, se compone de dos cuerpos con arbotantes y pináculos.
El templete del viril se asienta sobre una base hexagonal con escenas que conforman la Adoración de los Reyes Magos.
Más tarde, en 1735, el platero cordobés Bernabé García de los Reyes le añadió un basamento y elementos decorativos barrocos realizados en plata con objeto de que se levantara y descollara más.
En el friso se representa la vida y pasión de Jesucristo que se plasman en 18 medallones de relieve entero, 24 piezas enrejadas, 24 pilarillos y seis entrepiezas en las que están descrito lo siguiente: la Anunciación, Nacimiento; Adoración de los Reyes Magos; la Huida a Egipto; Entrada en Jerusalén; Azotes; Ecce Homo; Pasión, Crucifixión y Resurrección.
Sobre dicha bóveda, que configura un segundo cuerpo, se sustituyó un Resucitado de baja calidad por una Virgen de la Asunción en plata realizada en Milán, y que fue donada por el canónigo Bernardo Blázquez.