Su Gobierno nombró a Miklós Horthy comandante supremo del Ejército Nacional.
Durante este periodo, se presentó repetida pero infructuosamente a las elecciones parlamentarias.
Regresó como diputado a la Asamblea Nacional nuevamente en 1947, tras veinte años ausente de la cámara.
Abandonó su escaño y se retiró de la política ese mismo año.
Debido a sus contactos con diplomáticos estadounidenses y británicos, fue nuevamente amonestado por la policía en 1967.