El Colegio de la Purísima Concepción de los Niños Huérfanos de Salamanca, actualmente conocido como Edificio Solís, fue fundado en el año 1542 por Francisco de Solís, obispo de Bagnoregio y secretario del papa Pablo III, como colegio dirigido a acoger y educar huérfanos y niños sin recursos.
Sus trazas se deben a Stefano de Arenzano, maestro enviado desde Italia por el fundador.
Aun así, se considera que el diseño de la portada sur, que da al río, corresponde a Rodrigo Gil de Hontañón o alguno de sus aparejadores.
Es un edificio de planta cuadrada con claustro interior de dos pisos.
En el siglo XX fue un manicomio.