[1][2] Craven participó en la Segunda Guerra Mundial como piloto del DeHavilland Mosquito, un avión desarmado en el que sobrevolaba Alemania para tomar fotografías.
Aunque era un artilugio rudimentario, Craven adivinó su potencial y se propuso perfeccionarlo, convirtiéndolo en una lámpara.
Instaló en un pequeño cobertizo un laboratorio en el que se dedicaría a mezclar ingredientes en botellas de formas y tamaños diferentes.
Con sede en unos pequeños edificios ubicados en un polígono industrial de Poole, Dorset, Crestworth ha estado ofreciendo sus lámparas al mundo desde 1963.
Craven decía: "Si compras mi lámpara, no necesitarás drogas... Creo que siempre será popular.
[4] La lámpara Astro no ha dejado de producirse durante los últimos 50 años, siempre hecha a mano en Gran Bretaña desde 1963.
Edward Craven Walker siguió trabajando en Mathmos como consultor y director de la empresa hasta su muerte en el año 2000.
Esta pasión de Craven provocaría algunas tensiones en su vida, contribuyendo, por ejemplo, a su divorcio con Marjorie, con la que tenía 3 hijos.
Falleció en Matchams, Dorset, y recibió sepultura en un pequeño cementerio de New Forest.