Aunque con los continuos avances de la medicina, esos límites no son muy precisos y, además, hay diferencias por países al dictar leyes reguladoras específicas.
Las especialidades clínicas se corresponden con la figura tradicional de "médico": asisten personalmente al paciente con actividades preventivas, diagnósticas y terapéuticas, generalmente utilizando técnicas NO quirúrgicas.
Las especialidades quirúrgicas se corresponden con la figura de cirujano, y utilizan medios invasivos para tratar, modificar o extirpar físicamente la estructura patológica.
En Ecuador, para ejercer como especialista es requisito haber aprobado el examen de habilitación profesional (CACES), el cual evalúa los conocimientos médicos básicos.
Una vez aprobado el examen se obtiene la habilitación profesional, que certifica la idoneidad y el cumplimiento de las normativas establecidas por las autoridades regulatorias del país.