Antonio de Acuña y Cabrera

Se eligió a este último para que ocupara interinamente el cargo.

Rápidamente las noticias llegaron a Santiago, donde se encontraba la Real Audiencia.

Entonces Acuña escapó hacia la capital del reino, creyéndose restituido en su cargo.

Acuña no cumplió la orden, por lo que fue nombrado un nuevo gobernador, Pedro Porter Casanate.

Y su primera tarea fue forzar la salida de Acuña del país, quien llegaría a Lima donde fallecería tiempo después.