Antonio de Olivares

En ella se detalla que tenía el pelo negro y la nariz afilada.

Una vez en América, en el convento de Querétaro, recibió la formación necesaria para contactar con los naturales, en su labor evangelizadora.

Con ese objetivo en el año 1675 una expedición formada por fray Antonio de Olivares, fray Francisco Hidalgo, fray Juan Larios y Fernando del Bosque, fue enviada a explorar y reconocer el país más allá de las fronteras de río Grande, para comprobar las posibilidades de nuevos asentamientos en la zona.

En 1706 fue nombrado guardián del Colegio de Querétaro, donde permaneció tres años.

Fray Antonio fue organizando la fundación de la nueva misión, desde la próxima Misión de San Francisco Solano, para ello se reunió en muchas ocasiones con los indios de la zona (indios papaya), ganándose poco a poco su cariño y respeto.

Desafortunadamente, su trabajo fue suspendido durante algún tiempo, por un accidente que sufrió al cruzar un puente; el pie del animal en el que viajaba se metió en un agujero, cayendo violentamente al suelo y rompiéndose la pierna.

La Acequia Madre de Valero partía de la zona actualmente conocida como "Brackenridge Park" y hacia el sur hasta lo que hoy es "Hemisfair Plaza" y "South Alamo Street".

En 1719, Fray Antonio Margil obtuvo el permiso del marqués de San Miguel de Aguayo para fundar una segunda misión en San Antonio.

Sin embargo, Fray Antonio se opuso a ella.