Fue además gran almirante y teniente de los condados al norte del Trent, cuando se le asignó casa propia, en vistas a foguearle en la administración del reino como paso previo a su legitimación para heredar el trono.
Nació en Blackmore, Essex, Richmond, fue criado como un príncipe en el Castillo Sheriff Hutton en Yorkshire.
La relación de su madre con el rey no parece haber continuado después de su nacimiento, pero se casó poco después, y ella y su marido recibieron los favores del rey.
Durante un tiempo se encontró indispuesto y muchos cortesanos sospecharon que sufría de tuberculosis.
Muchos historiadores afirman que Eduardo VI murió de tuberculosis como Henry Fitzroy.