La iglesia estaba situada originalmente en la parte más alta de la localidad de Alcorlo y su advocación era el Divino Salvador.
Debido a la construcción de un embalse, las viviendas y todos los edificios de este pueblo fueron desalojados y expropiados.
En su nueva ubicación se construyó una cripta, inexistente en el templo original, para que sirviese de sacristía, archivo y sala de catequesis.
El obispo Jesús Pla Gandía inauguró el templo parroquial en 1988.
En 2020, se construyó una estructura aneja que sirve como sacristía y despacho del párroco, con acceso desde el crucero de la iglesia.