Destacan al pie del altar los restos de la reja labrada en Roma el año 1543.
Durante el siglo XVIII se llevaron a cabo numerosas reformas.
Ya en 1709 se nombra blanquear la iglesia, cosa que se mandará hacer al menos en otra ocasión, aunque en la actualidad las paredes vuelven a lucir la piedra desnuda.
Se mutiló la verja del altar mayor, se destruyó el órgano, desaparecieron todas las imágenes, cuadros, ornamentos y objetos de culto y se perdieron casi todos los libros capitulares, los registros parroquiales y el archivo musical.
[9] No se tienen noticias de las campanas anteriores al siglo XVII.
Con respecto a las actuales, la segunda está fechada en 1750 y la tercera en 1727.
Se supone que ya había reloj en el siglo XVIII, dado el prestigio de que contaron los relojeros villenenses en todo ese siglo y parte del siguiente.