Moroso es la persona física o jurídica que no ha cumplido una obligación a su vencimiento.
En el ámbito bancario español se suele aplicar a partir del tercer recibo impagado.
[1] Los morosos suelen incluirse en ficheros o listas[2][3] automatizadas para apoyar la toma de decisiones en el ámbito financiero y crediticio, estos ficheros pueden pertenecer a asociaciones bancarias, financieras o empresas privadas.
Las entidades consultan el fichero cuando una persona va a pedir un crédito, o una financiación, o cualquier otra operación que entrañe un riesgo económico, para comprobar si la persona que lo solicita está al corriente en operaciones similares con otras entidades.
[5] Consiste en hacer una petición formal al juzgado de primera instancia de nuestra localidad haciendo constar los datos del moroso, domicilio (si se conociese) y cantidad impagada (sobra decir que esa deuda tiene que estar reconocida legalmente por algún documento mercantil incluso creado unilateralmente.