Posteriormente pasó a las divisiones inferiores de la Universidad Católica, dirigidas por el entrenador Fernando Carvallo.
En dicho partido contra Unión San Felipe, González agredió al árbitro Enrique Osses, siendo expulsado y detenido, ante lo cual Bravo tuvo que ingresar en su reemplazo.
Al portero argentino le aplicaron veintidós fechas de castigo, por lo cual Bravo finalmente pasó a ser el primer arquero del equipo.
[6] Para la temporada 2010 es contratado por Unión San Felipe, equipo recién ascendido y que también disputa la Copa Sudamericana.
Luego de su paso por Santiago Morning, llega al Audax Italiano en donde defiende la portería por los siguientes tres años.