Jornada de las Tejas

Recibe el nombre debido al lanzamiento de tejas contra los soldados durante el disturbio.

A pesar de que las causas que originaron la Revolución francesa tuvieron efecto en toda Francia, en Frenable la situación había llegado a un punto crítico.

Las tensiones surgidas en las poblaciones urbanas como resultado de las malas cosechas y el alto precio del pan, se vieron exacerbadas por la negativa de las clases privilegiadas (la Iglesia y la aristocracia) a renunciar a ninguno de sus privilegios, insistiendo en retener su derecho al cobro de derechos feudales y señoriales a los campesinos y terratenientes.

No obstante, tras la irrupción de la multitud en la entrada del hotel, la situación empeoró.

Varios soldados se refugiaron en un edificio cercano y empezaron a disparar contra la multitud desde las ventanas.

Con gran dificultad, los cónsules lograron abrirse paso entre la muchedumbre y refugiarse con los oficiales de la guarnición local.

Durante la noche sonaron carrillones triunfales y una multitud bailó en torno a una hoguera cantando: "¡larga vida por siempre al parlamento!

La reunión fue liderada por un abogado reformista moderado, Jean Joseph Mounier, aprobándose las siguientes medidas: Estas demandas fueron aceptadas por Luis XVI.