No fue fácil acordar la financiación del proyecto, y los desembolsos significativos en el proyecto del reactor de agua ligera no se produjeron hasta el 2000.
Como consecuencia de la rotura del Acuerdo Marco en el 2003, KEDO ha perdido su función en gran medida.
Aún no se ha trasladado al emplazamiento ningún equipo clave para los reactores.
En 2005 había informes indicando que KEDO había acordado en principio finalizar el proyecto de reactor de agua ligera.
Corea del Norte exigió compensaciones y rehusó devolver el equipo que se quedó en el país valorado en $45 millones aproximadamente.