Máximo Sáenz

De no... ya verás si te ibas sin cenar habiendo como en el Plaza.

Last Reason tenía dos famosas columnas en el diario Crítica: una sección fija que se publicaba los sábados y "El consultorio patológico de Last Reason", que salía los martes.

Sáenz jugaba con la identidad de Last Reason y sostenía que no estaba autorizado a revelarla.

Máximo Sáenz también escribió bajo otros seudónimos en otros periódicos, como “Rienda Suelta” en La Nación, “Bala Perdida” en El Suplemento y “Half Time” en La Razón, en esta última sobre fútbol.

En ese debate, tanto Jorge Luis Borges como Roberto Arlt, recurrieron a Last Reason, como ejemplo de la lengua española viva: Jorge Luis Borges lo menciona en "Las alarmas del doctor Américo Castro", donde le responde a este académico del siguiente modo: