El Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) consideró probados estos hechos en sus sentencias, calificándolos como crímenes contra la humanidad, emitiendo veredictos de condena contra los líderes políticos y militares croatas, siendo la más notable la impuesta al vicepresidente de la autoproclamada república croata de Bosnia, Dario Kordić,.
Dario Kordić, cabeza visible del liderazgo local croata, fue hallado culpable de planificar e instigar las acciones genocidas y las campañas de exterminio ejecutadas por el brazo armado croata.
[1] El partido en el poder en la República de Croacia, la radical Unión Democrática de Croacia (HDZ), fundó y dirigió un brazo similar en Bosnia-Herzegovina, la Unión Democrática Croata en Herzeg-Bosnia (HDZ).
En las postrimerías del año 1991, la rama más extrema, bajo el mando de Mate Boban, Dario Kordić, Jadranko Prlić, Ignac Koštroman y otros reconocidos líderes locales como Anto Valenta,[1] contaron con el apoyo de Franjo Tuđman y Gojko Šušak, y se hicieron con el control de forma efectiva del partido.
En noviembre la municipalidad introdujo nuevos impuestos y requirió a las autoridades locales para que firmaran una declaración de alianza y fidelidad al nuevo gobierno croata, amenazando a quienes no obedecieran con su expulsión.
[2] Los bosníacos en la parte baja del poblado fueron objeto de violanciones y matanzas.
[8][9] Al mismo tiempo, las fuerzas croatas justificaron éste ataque sobre Gornji Vakuf en que allí había una seria oposición por parte de combatientes muyahidín, algo negado el Batallón británico presente en la zona.
Los bosnios restantes (un total de 90) serían rodeados y retenidos en la plazoleta central del villorrio.
Destruyeron una gran cantidad de hogares bosníacos, y causaron graves daños a las dos mezquitas del poblado.
El viernes 16 de abril de 1993, a las 05:30 horas (hora local); las fuerzas croatas atacaron simultáneamente Vitez, Stari Vitez, Ahmići, Nadioci, Šantici, Pirići, Novaci, Putiš y Donja Večeriska.
El día del ataque, las líneas telefónicas fueron cortadas, haciendo que cualquier intento de comunicación con el exterior fuera imposible.
Las mujeres croatas y sus niños ya habían sido evacuados en la madrugada del día de las confrontaciones.
Otros cuerpos encontrados en las ruinas de las casas fueron hallados totalmente chamuscados, tanto así que no pudo ser posible su identificación y sus posturas post mortem, sugieren que fueron quemados cuando aún estaban vivos.
[1] La mayor parte de los templos religiosos musulmanes fue reducida a escombros y destruida.
[1] Las tropas involucradas en los ataques eran principalmente los regimientos de Policía Militar del cuarto batallón y, en particular; la "Unidad Džokeri (Guasón)".
Muchos testigos en el caso Blaškić también citan que los soldados portaban el emblema del Ejército de Croacia.
[1] Tras la masacre, los líderes y la dirigencia croata, trataron de negar la masacre o la hicieron pasar por un "hecho ficticio", en otras partes del mundo y ante los medios de prensa que ya cubrían sus actos en la guerra.
Una respuesta similar fue dada por el general croata Tihomir Blaškić al coronel inglés Stewart, ante la presencia de Kordić.
Anto Breljaš, un antiguo miembro de la "Unidad Vitezovi", adjudicó a la "Brigada Viteška" del HVO el ataque sobre Stari Vitez, pero los componentes de la unidad detenidos negaron posteriormente haber tomado parte en la masacre en Ahmići como unidad, al tiempo que uno o dos testimonios individuales de algunos soldados confirmaron el hecho.
Tras dichos ataques se pueden situar las órdenes del coronel Blaškić dadas para capturar dos de los caseríos que "estuvieran con los o donde habitaran fuerzas enemigas".
El tribunal TPIY halló que Dario Kordić estuvo involucrado en esos ataques en una municipalidad a 25 kilómetros de Busovača.
Mostraban las escenas de devastación en el área del mercado, donde se aprecian cómo yacían los cuerpos en el suelo, autos destruidos, una parada de autobús demolida y otras edificaciones dañadas.
Tuka, sin embargo, no acató dicha orden a la espera de que se firmase un acuerdo que siguiera a una nueva política de compromiso en Fojnica para mantener la paz entre las partes.
El 25 de abril de 1993, durante una reunión en Zagreb entre el presidente bosnio Izetbegović y el autoproclamado presidente bosnio-croata Boban, se firma un acuerdo para el inmediato cese al fuego y a las hostilidades.
Cuando eran detenidos, los bosníacos fueron sujetos de malos tratos y sometidos a condiciones infrahumanas, que consistieron en hacinamiento en campos de concentración, con tratos generalmente crueles e inhumanos, pasando incluso hambre.
Los detenidos incluso eran, sin justificación de clase alguna, usados como rehenes o escudos humanos, y eran forzados a cavar trincheras y hasta fosas, o en el peor de los casos, e hijasu propia tumba.
Durante la guerra, éste complejo albergaría los cuarteles principales de la "Brigada Viteška".
A los anteriores se les retuvo en las aulas de clase y después en el gimnasio.
Los prisioneros militares fueron detenidos en el sótano y a 15 de ellos se les asesinó.
[2] Aquí se listan a los principales acusados de los eventos, juzgados tanto por el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia como por la Corte Suprema de Bosnia y Herzegovina: