Como futbolista comenzó en las categoría inferiores del Sárdoma de Vigo, club en el que estuvo desde los 10 a los 18 años.
En Mondariz completó dos temporadas en las que logró siempre el objetivo de la permanencia.
La siguiente campaña fue algo más complicada, su equipo entró mal en la liga tras perder todos los partidos del primer mes de competición, pero finalmente acabaron decimoterceros con 48 puntos y Luismi decidió no seguir en Mondariz debido al desgaste acumulado durante el año.
Con el Atios completó una vuelta completa en la que logró 26 puntos y finalizó su etapa dejando al equipo en la novena posición, algo que la directiva de su club de entonces consideró insuficiente.
Finalmente, y con bastante sufrimiento, el técnico consiguió salvar al equipo.