En el ámbito del derecho constitucional brasileño, una medida provisoria (MP) (en portugués medida provisória) es una norma con fuerza de ley del Presidente de la República, dictada sin la participación del Poder Legislativo, que sólo participará más tarde para discutirla y aprobarla.
[1] Es similar a la norma jurídica argentina del decreto de necesidad y urgencia (DNU).
En Italia, el uso de los decretos-ley, por su rapidez en la tramitación y eficacia, se hizo aún más fuerte en el contexto posterior a la Primera Guerra Mundial, teniendo en cuenta que los problemas latentes debían resolverse de manera rápida.
En 1937, con la Constitución modificada por Getúlio Vargas, este proceso italiano pasó a formar parte del ordenamiento jurídico brasileño y permaneció así hasta la Constitución de 1967, que consagró la centralización del Poder Ejecutivo.
Con la vuelta de la democracia y la reforma de la Constitución, los convencionales constituyentes decidieron modificar el decreto-ley en algunos puntos críticos, en un intento de quitarle el carácter autoritario que marcó su aplicación en el Gobierno Militar, y, así, recrear un nuevo instrumento.