Cincuenta mujeres han formado parte el Senado de los Estados Unidos desde su creación en 1789.
[1] La primera senadora fue Rebecca Felton, que ocupó el cargo por un solo día en 1922, pero la primera mujer electa para el Senado de los Estados Unidos fue Hattie Caraway en 1932.
Catorce de las senadoras fueron designadas para el cargo; siete de ellas para suceder a sus maridos después de fallecer.
El 115.º Congreso que inició sus funciones en 2017, cuenta con 21 senadoras de 100 (21 %), una más que el 113.º y el 114.º congresos, un récord histórico.