Nuestra Raza

Entre ellos se encontraban Pilar Barrios, Alberto Britos, Carlos Cardozo Ferreira, Roberto Suárez y Elemo Cabral.

Fue fundada por los hermanos María Esperanza, Ventura y Pilar Barrios, este último uno de los poetas afrouruguayos más importantes.

Sin embargo, la verdadera razón detrás del cierre se hizo más clara años después, en agosto de 1933, cuando Nuestra Raza fue relanzada en Montevideo.

Estos conventillos se convirtieron en centros culturales que fomentaban expresiones musicales como las comparsas, y Nuestra Raza se erigió como una de las principales voces de esta comunidad, abordando temas nacionales e internacionales relevantes para los afrodescendientes, defendiendo la libertad, los derechos humanos y combatiendo la discriminación.

[3]​ A lo largo de su existencia, la revista contó con la colaboración de numerosos escritores, periodistas e intelectuales, incluyendo a figuras destacadas como Elemo Cabral, Lino Suárez Peña, Carlos Cardozo Ferreira, Mario Rufino Méndez, Feliciano Barrios y Selva Escalada.

Durante su segunda etapa, Nuestra Raza se destacó por su activismo político incisivo y su compromiso con causas internacionales, reflejando una fuerte influencia de ideas socialistas en su enfoque.

Nuestra Raza movilizó a la comunidad afro uruguaya para exigir justicia y destacar el carácter racista del juicio.

La revista fue un motor para la formación del Comité de Raza Negra contra la Guerra y el Fascismo, a través del cual se abogó por el derecho a la autodeterminación de los pueblos y se condenó la agresión imperialista en África.

Nuestra Raza desempeñó un papel crucial en la gestación del Partido Autóctono Negro (PAN), que emergió como una respuesta organizada a las condiciones políticas y sociales de la época.