El carterista es aquel delincuente especializado en el robo de carteras de bolsillo y otros objetos que se suelen portar en bolsillos o bolsos, sin violencia y con la habilidad necesaria para evitar ser detectado su acto en los momentos inmediatos al hecho.
[1] Para evitarlos, algunos usuarios de carteras las unen a sus cinturones con pequeñas cadenas o las guardan en un bolsillo interior para que no se puedan alcanzar fácilmente sin notarlo el dueño.
Algunos viajeros sustituyen las carteras por riñoneras para encubrir y para proteger más eficazmente sus pertenencias.
Por ello que a los carteristas se les llama en ocasiones «ladrones de guante blanco».
Por lo general, este tipo de demostraciones suelen ser cómicas y hechas en escenario, por lo que el objeto es devuelto a la supuesta víctima al terminar el número.