Es endémica de Argentina y se la puede encontrar en las provincias de La Pampa, La Rioja, Catamarca, Chubut, Córdoba, Jujuy, Salta, San Juan, Mendoza, San Luis, Santiago del Estero, Tucumán y Río Negro.
Los frutos son rojizos, algo ovalados, con un diámetro de 5 a 11 mm, comestibles y dulces; la semilla es negra.
[1] El fruto al igual que el del piquillín negro es comestible, y es utilizado principalmente para hacer dulces (arrope).
Con este fruto se fabrica tradicionalmente una especie de aguardiente.
El mal del piquillín se presenta como una intoxicación que afecta al ganado vacuno, cuando éste se alimenta exclusivamente del arbusto rebrotado (generalmente ocurre luego de quemas o incendios de pastizales).