Climas templados aunque se adapta bien a condiciones de frío y heladas.
Una vez caídos del árbol, los frutos son consumidos por diversos mamíferos salvajes (carnívoros, ungulados, lagomorfos) que, en ocasiones, actúan como dispersores de sus semillas.
[3][4] Su uso principal es como pie robusto para injertar otros árboles frutales en las zonas donde se encuentra.
Los frutos son de sabor muy áspero y no se consumen habitualmente, su madera es apreciada.
Se dice que los pastores solían recolectarlos y guardarlos, para emplearlos luego con las hondas.