En su séquito se hallaba el mago Elimas o Barjesús.
Según el relato del libro de los Hechos de los Apóstoles (Hechos 13:1 y 2), San Pablo y San Bernabé predican la palabra y el procónsul con su familia quiere convertirse, pero el mago lo quiere impedir.
San Pablo llama al mago embustero, embaucador, empedernido, hijo del diablo y enemigo de todo lo bueno, y deja a Elimas ciego.
En ese momento, después del milagro, el procónsul cree.
[1] Después de esto, Pablo y Bernabé toman un barco con el que abandonan la isla de Chipre.