Nautilus (Julio Verne)

Aparece en sus novelas Veinte mil leguas de viaje submarino (1871) y La isla misteriosa (1875).

Fue encargado por piezas a diferentes fábricas y astilleros de todo el mundo para no levantar sospechas, que serían ensambladas todas ellas por los propios empleados de Nemo y por la futura tripulación en una isla del Pacífico.

Era de forma ahusada, muy parecido al pez vela, por lo que podía ir a altas velocidades.

El Nautilus terminó sus días en una cueva de la Isla Lincoln, descrita en la novela La isla misteriosa: se convierte en la cripta del capitán Nemo y acaba por ser enterrada por los escombros que produce la titánica explosión volcánica que arrasa y destruye por completo la historia.

El mismo creó un sumergible con ese nombre en 1798, pudiendo permanecer durante 38 horas a una profundidad de ocho metros.

El Nautilus , ilustrado en la novela La isla misteriosa