Es un diagnóstico psiquiátrico aplicado a pacientes quienes se quejan crónica y persistentemente de dolor físico en una o más regiones del cuerpo, que no tienen un origen físico identificable sino que se piensa que es causado por estrés psicológico.
[1] El dolor suele ser tan grave que afecta el funcionamiento y desenvolvimiento adecuado de los pacientes.
[2] Puede durar unos pocos días o bien varios años.
Es un trastorno que puede comenzar a cualquier edad, y más mujeres que hombres la padecen.
El trastorno de dolor es un tipo de trastorno somatomorfo que menudo se produce después de un accidente o durante una enfermedad que ha causado verdadero dolor y que luego toma vida propia.