[1] En términos de elementos cuantitativos, proporcionan datos que acompañan a los escenarios sobre población nacional, urbanización y PIB (per cápita).
[5] Los SSP se pueden combinar con varios Modelos de Evaluación Integrada (IAM), para explorar posibles caminos futuros tanto en lo que respecta a las variables socioeconómicas como climáticas.
[6][7] El mundo sigue un camino en el que las tendencias sociales, económicas y tecnológicas no se desvían marcadamente de los patrones históricos.
Las instituciones mundiales y nacionales trabajan para lograr los objetivos de desarrollo sostenible, pero lo hacen lentamente.
El crecimiento de la población mundial es moderado y se estabiliza en la segunda mitad del siglo.
Las políticas cambian con el tiempo para orientarse cada vez más hacia cuestiones de seguridad nacional y regional.
También hay fuertes inversiones en salud, educación e instituciones para mejorar el capital humano y social.
Existe fe en la capacidad de gestionar con eficacia los sistemas sociales y ecológicos, incluso mediante la geoingeniería si es necesario.