El viaducto atraviesa el río Llobregat, dos líneas de ferrocarril y la carretera C-245, que une Castelldefels con Gavá.
Finalmente, el viaducto se completó en 2006, año en que entró en funcionamiento, sin incidencias ni ningún desvío del presupuesto inicial.
El viaducto fue diseñado por la empresa multinacional Pedelta, especializada en ingeniería civil y con sede en Barcelona.
Esta empresa, además, se encargó del proyecto constructivo y la dirección de obra.
[5] El primer tramo del viaducto se construyó con cimbra autoportante, lo que permitió evitar cualquier interferencia en el tráfico inferior.