Nacido en una localidad rural, estudió en el seminario de Buenos Aires.
En 1911 viajó a Roma, donde estudió en el Pontificio Colegio Pío Latino Americano.
Para ocupar el cargo de arzobispo nombró al padre Guilland, que fue ordenado obispo por el nuncio apostólico Filippo Cortesi en marzo de 1935.
[4] No obstante, posteriormente se manifestó alarmado por la intromisión del gobierno en la elección e inspección de los maestros de religión, una materia obligatoria por entonces en las escuelas públicas del país.
[7] Participó en las sesiones preparatorias del Concilio Vaticano II,[8] aunque no llegó a participar del mismo, ya que falleció en su sede en febrero de 1962.