De regreso a España, trabajó en la sección de Prensa y Propaganda del Auxilio Social, organismo creado por Franco para atender a niños afectados por la guerra civil española.
[5] Fue considerada una mujer pionera por su actividad periodística, por su trabajo a pie de calle, ya fuera bajando a las galerías de la mina en Mieres, o recorriendo Israel o el Polo Norte.
También editó la colección de posguerra La Novela Corta, donde colaboraron destacados autores como: Pío Baroja, Alberto Insúa, Wenceslao Fernández Flórez, Enrique Jardiel Poncela o José María Pemán.
Trabajó dos años en el diario asturiano La Nueva España, donde tenía sección propia "El mundo es grande y terrible".
Con motivo de su fallecimiento, el ayuntamiento asturiano expresó junto con el pesar por su marcha, su recuerdo "para una mujer comprometida con la cultura que tuvo una vida larga y muy plena”.