[2] La imprecisión fue subsanada en el año 2008 mediante un decreto provincial que establecía la superficie y límites del área protegida como la resultante de una poligonal cuyos vértices están definidos en coordenadas Gauss-Krüger, que incluye el área inicialmente protegida y el amplio sector marino cercano.
Dos veces cada día, este movimiento deja sumergidos o descubiertos amplios sectores intermareales que en algunos puntos pueden llegar a tener 7 km de ancho, cuya naturaleza incluye playas arenosas o barrosas —algunas con cangrejales—, grandes superficies planas de rocas sedimentarias o restingas con importantes colonias de pequeños mejillones y bajíos salobres.
En algunas zonas bajas que suelen permanecer húmedas se encuentran algunos juncos (Juncus lesueurii) y pastos salados (Distichlis spicata).
Entre ellos se encuentran mejillones (Mytilus edulis), los llamados mejillines (Brachidontes rodriguezi), especialmente numerosos en las superficies intermareales, vieiras, algunas ostras de la familia Ostrea, cholgas (Aulacomya atra) y pulpitos (Octopus tehuelchus), además de las almejas comunes (darina solenoides), panopeas (panopea abbreviata) y rosadas (Amiantis purpurata).
Entre las aves marinas costeras que nidifican en el área protegida se han registrado ostreros pardos (Haematopus palliatus), gaviotas cocineras (Larus dominicanus), chorlitos doble collar (Charadrius falklandicus), gaviotines sudamericanos (Sterna hirundinacea) y pardelas boreales (Puffinus puffinus), entre otras.
Entre ellas se puede enumerar el flamenco austral (Phoenicopterus chilensis), el chorlito ceniciento (Pluvianellus socialis), la gaviota cangrejera (Larus atlanticus), el petrel gigante común (Macronectes giganteus), el albatros errante (Diomedea exulans), el albatros real (Diomedea epomophora), el albatros ceja negra (Thalassarche melanophris), el petrel barba blanca (Procellaria aequinoctialis) y la pardela oscura (Puffinus griseus).