Fue lanzado en enero de 1959 con carrocería sedán de dos puertas y se denominó Octavia, ya que era el octavo coche producido por la nacionalizada compañía Škoda.
La versión familiar fue lanzada en 1961 y fue denominada Octavia Kombi permaneciendo en producción hasta 1971.
Entre 1959 y 1971, se construyeron 365 379 Škoda Octavia, incluyendo 54,086 unidades de la versión Kombi.
Presentaba ejes delanteros rediseñados con un muelle helicoidal y amortiguadores telescópicos en lugar de ballestas como en el 440.
Los familiares eran un poco más pesados, 1.365 kg y montaban motores de 1,2 litros.