Remington Arms posteriormente lo estandarizó como alternativa comercial e introdujo una variante del Remington modelo 700 en este calibre en 1987, cuando fue legitimizado por la marca.
Actualmente el calibre viene cobrando cierto resurgimiento; Ruger viene produciendo la variante africana de su modelo Ruger M77 Hawkeye para el calibre .35 Whelen, tambien se han venido produciendo recientemente fusiles Nosler y CVA en este calibre.
Una versión de su origen es que esté fue diseñado por el Coronel Townsend Whelen cuándo estuvo a cargo del Arsenal Frankford.
[2] Originalmente los cañones usados para el .35 Whelen se producían con un paso de 1:16", pero actualmente son preferibles los cañones de 1:14, que permiten estabilizar proyectiles de mayor coeficiente balístico, volviendo al .35 Whelen un competidor directo con cartuchos como el .338 Winchester Magnum.
Debido a que usa cargas de pólvora similares a las de cartuchos desarrollados a partir del .30-06 Springfield, el retroceso que genera no es mucho mayor, haciéndolo fácil de disparar y permitiendo desarrollar rifles relativamente ligeros en este calibre, si es que se comparan con cartuchos Magnum con una performance similar.