3-metilhistidina

Aparece liberado una vez degradadas las proteínas miosina y actina, donde incluye un grupo funcional imidazol, el cual es típico en los aminoácidos aromáticos.

La 3-metilhistidina no puede ser reutilizada para la síntesis proteica en el músculo ya que el tRNA específico para este aminoácido es deficiente.

Mediante esta técnica se ha observado que la fracción de proteínas musculares degradadas no es significativamente diferente en los ancianos comparado con jóvenes.

Podemos afirmar que con la edad el proceso de degradación proteica a nivel general disminuye.

Es posible, por tanto, utilizar la 3MH como marcador del catabolismo proteico muscular, ya que no está sujeto a ninguna otra vía metabólica diferente a la del catabolismo proteico en los diversos estados fisiológicos y patológicos.

En bebés prematuros esta técnica se ha comprobado mediante estudios centrados en enfermos de insuficiencia respiratoria.

Una disfunción renal podría dar lugar a errores en los resultados de las pruebas ya que la 3-MeHis se excreta exclusivamente por la orina.

[6]​ Otros estudios describen la variación de 3-MeHis mientras se entrenan la resistencia y el sprint corriendo.

la causa principal son los balances negativos de Nitrógeno que aparecen por la excesiva desproteinización en los músculos.

No obstante, podemos citar varias enfermedades que vienen justificadas también por unos niveles irregulares de este aminoácido.

Modelo tridimensional de 3-metilhistidina