El AK-101 está dirigido a las Fuerzas Armadas que buscan un arma que combine la compatibilidad logística y la familiaridad de los cartuchos 5,56 x 45 OTAN con la fiabilidad de un Kalashnikov.
El AK-101 es un arma de fuego selectivo que puede dispararse tanto en modo semiautomático o totalmente automático.
Estas carabinas AK-10X, al igual que sus fusiles homólogos, se hicieron principalmente para la exportación.
Un error común es creer que el AK-101 ha entrado en servicio como el principal fusil de asalto de la Federación Rusa, pero esto no es cierto; el AK-74M sigue siendo el principal fusil de asalto junto con el AK-105 que está siendo introducido en servicio, ambos empleando el cartucho 5,45 x 39.
El AKM, disparando cartuchos 7,62 mm de la Unión Soviética, está en servicio limitado con unidades seleccionadas en el ejército ruso, y el AK-103 está en servicio con algunas agencias de la policía civil rusa.