Esta había dejado al ejército francés de Oriente atrapado en Egipto y todos los esfuerzos para enviar provisiones y fuerzas —incluyendo tres expediciones llevadas a cabo por la escuadra de Ganteaume— habían resultado infructuosos.
Más tarde, el Swiftsure fue puesto en servicio nuevamente por la Marina nacional francesa y tomó parte en la batalla de Trafalgar de 1805, en la cual fue capturado por los británicos y, consecuentemente, volvió a la Marina Real.
La llegada de provisiones o ayuda desde Francia era imposible, el comandante Jean Baptiste Kléber había sido asesinado y la invasión británica era inminente.
Llegado ese momento, el almirante era consciente de que sus barcos se verían superados en número por la fuerza expedicionaria británica que estaba en proceso de formación más hacia el este.
[5] En la región también se encontraba el HMS Swiftsure, un navío británico equipado con 74 cañones y comandado por el capitán Benjamin Hallowell, que había participado en la batalla del Nilo librada tres años antes.
[5] Por otra parte, el buque se encontraba en mal estado y tenía varias fugas.
[5] A menos que Hallowell pudiese evitar la trampa, su barco quedaría atrapado entre las dos divisiones francesas, donde sería aplastado.
Hallowell continuó con sus intentos de escapada durante seis horas, pero los buques franceses eran demasiado rápidos.
Las fuerzas dirigidas por Ganteaume se adelantaron al barco británico y después se lanzaron hacia él, por lo que, a las dos de la tarde, el Swiftsure estaba en serio peligro de quedar rodeado.
Las pérdidas francesas, en cambio, fueron mayores, con cuatro bajas a bordo del Indivisible y seis fallecidos y 23 heridos en el Dix-Août, a pesar de que ninguno de los dos navíos sufrió daños mayores en la acción.
[11] Asimismo, Hallowell recibió elogios por haber obligado la separación del convoy, que, de lo contrario, también se habría perdido.