En 1917 trabajó como oficial escribiente del Juzgado Primero de Armenia.
En Medellín se vincula a la redacción de los periódicos El Espectador y El Correo Liberal y aparecen sus colaboraciones en la revista Cromos.
Su rol como escritor popular, cuentista fecundo y extraordinario costumbrista es merecedor de múltiples galardones.
En el año 1972 recibió del departamento de Caldas la Orden “Aquilino Villegas”.
En 1984, el Instituto Colombiano de Cultura le concede la condecoración “Medalla al Mérito”.