[2] El papel decisivo para completar el grupo lo jugó Cristina Musteață, entrenadora de la Escuela Deportiva local.
Gracias a la implicación y las relaciones personales de Cristina, el equipo logró legitimar para el debut en el campeonato de Moldavia a algunos grandes nombres del fútbol femenino, como las líderes de la selección nacional Ludmila Caraman y Ludmila Andone, o las experimentadas Tatiana Gherghelegiu, Maria Spânu y Laura-Maria Mereuța.
Todos estos aspectos del desarrollo dieron el rendimiento esperado y los resultados no tardaron en llegar.
En la final de Copa, el rival FC Noroc Nimoreni volvió a ser derrotado, marcador 3-1.
Ganó todos los partidos de la gira y se encaminaba con pasos seguros hacia un nuevo título.