[1] En 1566, fue acusada de cometer hechicería junto con otras dos mujeres: Elizabeth Francis y Joan Waterhouse.
Su hija de 18 años Joan Waterhouse fue acusada (pero encontrada como no culpable) del mismo delito.
Francis mantuvo el gato durante quince o dieciséis años, antes de que se lo diera a Agnes Waterhouse.
[6] Un panfleto publicado después del juicio de 1579, demostró que Elizabeth Francis y Agnes Waterhouse eran hermanas.
Según los informes, ella le enseñó a practicar la brujería de la misma forma como le había enseñado su abuela, la Madre Eve, diciéndole que " debía llamarlo Satanás y debía ofrecerle su sangre y su leche como lo hacía su antigua dueña.
"[1] Waterhouse confesó haber matado primero a uno de sus propios cerdos para "ver lo que podía hacer.
[7] Ella negó rotundamente haber asesinado a alguien por medio de la brujería, pero aun así fue declarada culpable.
"[1] La parte más incriminatoria del relato, fue cuando Brown le preguntó al demonio quién era su ''dama'', a lo cual este giró su cabeza hacia la residencia de Agnes Waterhouse.
También confesó haber intentado enviar a su gato Satanás, para dañar y averiar los bienes de su vecino, un sastre llamado Wardol.
[1] El juicio de Chelmsford fue peculiar en la brujería inglesa por lo irracional que llegaban a ser las acusaciones y en el énfasis sobre el espíritu familiar.